Ignacio Ondargáin
NACIONALSOCIALISMO.
Historia y Mitos
Capítulo XIV
(texto revisado
en diciembre de 2006
INTEGRIDAD
PERSONAL Y SOCIAL
1- Introducción
2- Por qué este
mundo es un mundo degenerado
3- Cómo este mundo
trata de doblegar la verticalidad
4- Algunas claves
físicas y del lenguaje corporal
5- Urbanidad y
buenas maneras
6- Tabaco, alcohol
y otras drogas
7- La alimentación
y el respeto a los animales
8- El amor es más
fuerte que la muerte
9- Liberarse de
la caverna de las sombras
1- Introducción
En este capítulo
XIII de Historia y Mitos NS, sobre la “INTEGRIDAD”, tratamos de la práctica diaria del guerrero en este mundo
Los guerreros hiperbóreos
entienden esta vida como una guerra contra un mundo al que hay que transmutar. Esta guerra dura toda la vida. La transmutación
que busca el guerrero, empieza en uno mismo, en el propio ser. Una guerra contra el propio ser demiúrgico, como San Jorge
contra el dragón. Sin esta condición, toda lucha exterior sería estéril. Finalmente, persistiendo en la práctica, el guerrero
fuerza su propia transmutación, sometiendo la naturaleza, su cuerpo físico (el dragón), a su voluntad. Sólo la práctica hace
que cada día seamos más fuertes y más libres.
“Con pulso firme, he tomado las riendas del caballo hasta hacerlo mío: ahora caballo y jinete somos
uno”.
2- Por qué
este mundo es un mundo degenerado
Este mundo es el
producto de un proceso degenerativo. Es totalmente falso el mito inventado por la propaganda “democrática” moderna
según el cual viviríamos un progreso... el mito del “progresismo”. Siendo precisos, vemos cómo el mundo actual
no progresa hacia ninguna parte. Al contrario, lo que hallamos es únicamente degeneración, es decir, la sociedad entera está
sometida a un proceso de destrucción y enfermedad. ¿Es posible liberarse de este proceso democrático-demoníaco?. En el hombre,
en cada uno de nosotros, se da una terrible lucha que se reproduce eternamente en todo el universo. Así es. Nosotros, como
parte de este universo, participamos, somos parte de esta Guerra Cósmica. Encontramos por un lado, la vida (la fuerza vital, la fuerza del espíritu creador) y por otra parte, la
muerte (las fuerzas de la enfermedad, el caos y la disolución). Entre estas dos fuerzas nos movemos mientras vivimos en
este mundo, pero llega un momento en el que una de ellas acaba por imponerse.
Las personas cuya
fuerza está dispersa y tendente hacia el caos, son incapaces de manifestarse desde un “centro inmóvil” o polar.
Un ser así, descentrado y desligado de la fuerza trascendente, no puede vivir y manifestar la sana y vigorosa calma que vive
y emana la persona íntegra. El ser humano vulgar tiende hacia los aspectos simiescos, se mueve de forma caótica e incontrolada:
le pica y se rasca a todas horas, como un mono, la cara, nariz, orejas, se toca la boca, cabello, cualquier parte..., está
íntimamente dominado por su biología física, caprichosa y caótica, quebradiza e insegura. Trata de satisfacer sus apetitos.
Las generaciones
programadas-educadas en “democracia” están modeladas en el cretinismo, la estupidez, la suciedad física y mental,
drogadicción, promiscuidad, modelos lánguidos y enfermos, vicio, irresponsabilidad...
Estas generaciones
tienen tendencia a la “depresión” y a la lástima. Son enfermas, buscan el placer fácil frente al que viene del
esfuerzo y de la superación de uno mismo. Carentes de principios firmes y verdaderos, son sucios, desordenados, inseguros,
débiles de cuerpo, mente y carácter. Amanerados, deseosos de llamar la atención, infantiles, no-maduros, visten “provocativamente”,
tal y como el Sistema les incita a través de patrones ofrecidos por sus medios de comunicación-programación. Se creen rebeldes,
pero su rebeldía (Che Guevara, marxismo, okupas, anaquismo, separatismo, materialismo...) es promocionada y ofrecida por el
mismo Sistema Capitalista-Democrático del que son tan sólo un producto.
Toda esta educación
para la debilidad, a la hora de enfrentarse con la realidad del mundo choca desastrosamente. Entonces, muchas veces, ya es
tarde: se han creado seres débiles, esquizofrénicos, carentes de vigor físico y mental y educados sobre valores igualitaristas
falsos, absurdos, irreales y delirantes. El Sistema demoníaco-democrático que domina el mundo, cruel y destructivo, tiene
un único interés: crear seres inconsistentes y fáciles de dominar. El modus vivendi de estos seres-producto se entenderá e
identificará (como un reflejo de sí mismos), con todo lo cobarde, lo miserable y el inframundo: los partidos políticos dirigidos
por el Sistema, las ONG modernas, los estilos de vida degenerados. Esto son las generaciones “democráticas” programadas-educadas
por el Sistema-Democrático-Capitalista, para ser esterilizadas, destruidas y llevadas a la muerte. Estupidizados y programados,
asisten a la consumación de su propio holocausto: ellos son el alimento del Demiurgo. Sufren física y mentalmente porque sus
cuerpos físicos son enfermos, como lo son sus mentes, y lo que aún hay de consciencia en ellos grita desesperadamente y se
lamenta por la destrucción a la que se halla sometida. No obstante, dominados por su inconsciencia no consiguen reconocer
la causa. Como dice Platón, en el mito de “La Caverna” (“La
República”), son presos encadenados frente a una pared en la que les proyectan sombras: pero,
en su total esclavitud, el Sistema les ha programado para creerse libres y “democráticos”... y ellos lo creen.
Los seres degenerados
no pueden manifestarse con cortesía, comedimiento en el trato, ingenio, elegancia, amabilidad... urbanidad, ya que estas son
virtudes producto del “distanciamiento” divino. Por esto, el mundo moderno, al hacerse más y más vulgar, grosero
y soez, nos indica que tiene una total ausencia de divinidad. Los seres degenerados son incapaces de manifestar cualidades
divinas porque les domina el aspecto simiesco. En cuanto a la cuestión racial, ya hemos visto qué razas se hallan más o menos
capacitadas para poder alcanzar el estadio de dignidad divina. Ahora no vamos a entrar en ello. Pero sí hemos de dejar bien
claro que, como seres caídos, los hombres conscientes son los que sienten necesidad de la divinidad y se esfuerzan por alcanzarla.
Y esta (la divinidad), sólo la alcanzamos si conseguimos liberarnos de los aspectos simiescos en los que se halla caída y
a los que se halla vinculada nuestra naturaleza humana-animal. De lo contrario, si no consiguiéramos liberarnos, acabaríamos
cayendo atrapados irremediablemente en las redes de Maya, el mundo de ilusión que es el alimento del Demiurgo-Jehová.
Julius Évola en el libro “Rebelión contra el Mundo Moderno” dice: “Impasibilidad, estabilidad, permanece firme e indoblegable, como un monte. Sé inmutable como el cielo mismo
y mantén firme el poder de tu puño... (...) Después de la gloria, la centralidad (o polaridad), y la estabilidad, la paz es
uno de los atributos fundamentales de la realeza. Se trata de una paz interior y positiva, no separada del elemento “triunfal”,
de modo tal de no expresar cesación o pasividad, sino más bien perfección de actividad, actividad pura, entera y recogida
en sí misma. Se trata de aquella calma que atestigua realmente lo sobrenatural”.
Frente a la miseria
soez y la suciedad del mundo moderno, hallamos, como recuerdo de otro mundo más bello y más libre, la cortesía y lo cortés.
Esta, la cortesía, tiene su origen en la palabra Corte y se refiere al acompañamiento del Soberano. Y nosotros sabemos que
únicamente es Soberano quien es dueño de sí mismo. Por esto los reyes modernos ya no ejercen su función.
La cortesía incluye
la “urbanitas” o urbanidad (respeto, reglas y normas que rigen el trato
social). Además, cortesía implica integridad personal, comedimiento. El hablar cortés es ingenioso, fino, de buen gusto, como
el amor cortés de los trovadores occitanos. Elegancia discreta y austera, gracia interior. El espíritu se manifiesta libre
de aspectos burdos y vulgares cuando se han vencido y exterminado los aspectos simiescos.
Pareciera ser algo
que pudiera estar al alcance de cualquiera con sólo proponérselo, o con sólo aparentarlo... pero no es así. La cortesía es
algo íntegro que emana desde el corazón, el interior de la misma persona: algo que se es: “ser
o no ser”. Y esta integridad, como la misma palabra indica, es total y no sólo una faceta de la persona; es un principio
que determina la persona totalmente. No puede aparentarse, pues “todo se ve,
todo se sabe” y únicamente los incautos ven sólo las apariencias. Tampoco puede alcanzarse fácilmente. Hay personas
que, por su naturaleza, están más cerca del “Principio”, pero sin esfuerzo e iniciación jamás se alcanza la reintegración
de la personalidad.
3- Cómo
este mundo trata de doblegar la verticalidad
El espíritu superior
viene marcado por el principio de la verticalidad. Esta, la verticalidad, distingue la persona que se halla firmemente centrada
en el principio de lo inmutable. Vemos este principio recogido en el mito de San Jorge: el cuerpo animal dominado por nuestra
voluntad es el dragón dominado por San Jorge. San Jorge es el espíritu y el dragón es el cuerpo físico.
Si la muerte tira
de nosotros hacia lo bajo y nosotros somos más fuertes que ella, finalmente, la naturaleza dominada se pone a nuestro servicio.
La naturaleza sirve amorosamente al hombre sano, fuerte, vigoroso y puro. Parzival,
de Wolfram von Eschenbach es el “loco puro” capaz de superar todas
las pruebas y los peligros, gracias a su vigor y a la pureza de su corazón.
Por esto, el Demiurgo
pone tanto interés en enfermar a los últimos descendientes de los divinos hiperbóreos sobre esta tierra: privándoles de la
salud y el vigor, les roba el poder. Al debilitarse el vigor físico-mental, se pierde la capacidad creadora así como la capacidad
de acumular poder psíquico-espiritual. De esta manera, la civilización ha entrado en un ciclo final. Se ha perdido la capacidad
creativa aria y en la actualidad el mundo sólo se mueve por el lucro, la usura, la especulación y de las actividades criminales
y mafiosas.
Hallándonos en
el final de este proceso, podemos ver cómo la involución provoca estragos en la raza y en las personas a nivel individual.
Terribles enfermedades degenerativas azotan a la “humanidad” actual. Enfermedades “nuevas” que vienen
a sustentarse sobre una política criminal a todos los niveles que promueve la proliferación de todo tipo de enfermos físicos-mentales.
En este mundo moderno, víctima de un proceso maligno, hallamos, como encarnación de los aspectos demoníacos y del pecado,
a las razas “de color”. El mundo es arrastrado y dominado por los aspectos simiescos y la escala racial se degrada
hacia los diversos tipos de subhombres. En esto tienen un papel muy importante las ONGs modernas, creadas y financiadas por
el poder mundial para transmitir y “legitimar” sus ideologías. El fin, ya lo hemos dicho, es arrastrar al hombre
hacia un tipo infrahumano carente de divinidad.
4- Algunas
claves físicas y del lenguaje corporal
Frente a todo este
proceso degenerativo, nosotros podemos alcanzar la dignidad y el autodominio. Para ello, cultivamos la impasibilidad, la cual,
en una relación de sincronía da como resultado la liberación del espíritu.
Sólo un cuerpo
vigoroso puede mantenerse firme y sano. Para ello, es preciso ejercitar los músculos del cuerpo. La fuerza motriz del cuerpo
proviene de las abdominales. Las posiciones del Yoga nos ayudan a mantener e incrementar el vigor físico. El Método Pilates, desarrollado por un alemán cuando estaba prisionero en un campo de concentración británico durante
la primera guerra mundial, da una importancia definitiva a las abdominales. Las abdominales deben crear un “Cinturón
de Acero”. Unas abdominales fuertes son fundamentales para la firmeza y la salud física, tal y como también desarrollan
el Yoga, el Chi’kun y otras prácticas físico espirituales.
Más adelante hablaremos
de la importancia de una alimentación sana en todo este proceso. Una alimentación sana nos proporciona la fuerza y la vitalidad
necesaria para una vida llena de energía.
Un principio de
la vida es respirar. El hombre dueño de sí mismo respira siempre por la nariz, tanto la inspiración como la expiración. En
situación normal, la boca permanece cerrada y las dentaduras superior e inferior juntas. La respiración es pulmonar.
La postura de pie,
en una persona digna, tiende siempre hacia la verticalidad. Los hombros se dirigen hacia atrás, abriendo el pecho. La postura
debe tender hacia la comodidad y el sosiego dentro de la verticalidad. No debemos dejarnos
caer nunca en el aspecto de dejadez, caminar con hombros caídos, cuerpo echado hacia adelante, zancadas demasiado largas
o con otros vicios.
Sentados, los pies
se apoyan sobre el suelo de forma natural, sin retorcerlos. La espalda cuando se apoya en el respaldo del asiento lo hace
desde la base del mismo. Es buen ejercicio que ayuda a equilibrar y verticalizar la energía del cuerpo sentarse con la espalda
recta y sin apoyarse en el respaldo.
Vigilar las manos.
Las manos permanecen quietas tanto cuando estamos entre gente como cuando estamos solos. Pueden juntarse las dos manos para
que no estén moviéndose inconscientemente y tocando cualquier cosa. No se toca la cabeza con las manos, salvo que exista una
causa justificada ineludible. No se toca ni se hurga cabello, cara, nariz, boca,
orejas... El uso simiesco de las manos tiende a que nos toquemos nariz, orejas, boca, cara, barbilla, rascarse cuerpo, cuello,
brazos, piernas... Aprender a mantener las manos sin tocar el cuerpo nos da dignidad. Si, por ejemplo, nos pica la nariz,
se aguanta el picor o si es necesario, podemos hacer uso de un pañuelo. Una excepción a todo esto son los ojos; si nos molestan
sí podemos tocarnos los párpados. Igualmente, en situaciones especiales (dolor de muelas, golpes...) podemos tocar la zona
afectada con intención de reducir el dolor, pero siempre es preferible mantener las formas en público y no transmitir a los
demás lamentos ni nuestra sensación de dolor.
Cruzar los brazos
es señal de persona cerrada, por lo que hemos de evitar hacerlo, salvo que deseemos
transmitir desaprobación hacia quien tengamos cerca.
Los codos se mantienen
lo más cerca posible de las costillas. Despegar los codos de las costillas y dirigirlos hacia los demás es una actitud de
agresión. Lo mismo podemos decir de las rodillas, ya que apuntar con la rodilla hacia alguien es un signo de defensa-agresión.
Evitar los “ticks”
y los gestos repetidos nerviosamente. En particular, deben evitarse los movimientos nerviosos inconscientes, tales como golpear
repetidamente la mesa con los dedos o con un bolígrafo, jugar con un objeto, abrocharse y desabrocharse la chaqueta y otros
semejantes. Muestran y transmiten inseguridad y degeneración.
Lenguaje gestual:
-cerrar los puños,
implica enfado,
-frotarse las manos,
anticipación de algo que se está pensando.
-velocidad de gestos
implica nerviosismo
-calma es señal
de bienestar
5- Urbanidad
y buenas maneras
En una persona
existen dos principios sin los cuales no sirve nada de lo que viene a continuación. Estos son, el orden y el aseo:
- Aseo personal.
Es fundamental en una persona el aseo. Ducharse una vez al día. La colonia no substituye al aseo. Lo mismo la ropa, la cual
debe ser limpia y arreglada.
- Orden. Nuestro
entorno debe permanecer limpio y ordenado. Habitación limpia y recogida. Una
habitación sucia y desordenada es hábitat de un ser degenerado.
Ortega y Gasset
clasificaba a las personas en dos grandes grupos: las que poseen un buen tono vital y las que carecen de él o tienen un tono
vital bajo. El carisma, entendido como poder de comunicación y seducción es lo que ha caracterizado a personajes históricos
como Alejandro Magno, Napoleón o Adolf Hitler.
En términos generales,
podemos decir que la imagen personal es el resultado de, al menos, tres grupos
de cualidades:
Las propias condiciones
físicas de nuestro cuerpo.
El lenguaje no
verbal con que el cuerpo se expresa.
La indumentaria
que lo recubre y personaliza.
De cómo hablar,
comportarse y dirigirse a los demás:
La capacidad de hablar bien es el camino más breve hacia la distinción. Es la que destaca a un hombre y le hace sobresalir
entre la multitud. Importante saber hacer un uso correcto de la voz: cuidar la claridad y entonación.
Antes de tratar
de transmitir a alguien un conjunto de ideas, debe tenerse muy claro el mensaje. El sentido del discurso, lo que hay que transmitir,
debe estar delimitado con la máxima exactitud.
Los gestos acompañan
a las palabras, reafirmándolas y dándoles nuevos matices que enriquecen su significado. Ahora bien, conviene no abusar de
la gesticulación.
Es bueno dejar
que nuestro interlocutor sea quien hable más. Mientras le queden cosas por decir, no nos prestará la menor atención. No interrumpamos
la exposición que nos hacen. Saber escuchar es una virtud. Hemos de mostrar respeto a las opiniones del prójimo y si creemos
de forma diferente no decirle directamente que se equivoca, destacando primero sus aciertos y virtudes. Si hay que enseñar
a otro, no debemos situarnos en posición de superioridad. De otro modo, resultaría ofensivo.
El nombre de la
persona es para ella uno de los sonidos más entrañables que pueda escuchar. No temamos abusar repitiéndolo muchas veces, siempre
se lo agradecerán.
Estar en pie implica
una actitud de disponibilidad, de servicio, de dinamismo y, lo que es más apreciable, de cercanía. Inclinarse ligeramente
hacia adelante, da una imagen de “voluntad de contacto” o interés.
Llamando por teléfono,
nunca preguntar la identidad de quien ha descolgado el teléfono sin antes revelar quién eres.
No fumar en público
y en presencia de otras personas evita molestar. Sólo podemos fumar si el anfitrión nos ofrece un cigarrillo. Nunca se fuma
durante las comidas ni visitando enfermos.
Un truco para reforzar
nuestras amistades es anotar en la agenda el cumpleaños de amigos y conocidos. Una llamada telefónica, un telegrama o una
carta obran milagros; demostramos así que realmente nos acordamos de ellos y que nos preocupamos por ellos.
Del vestir:
En el vestir hay que saber elegir la ropa de forma inteligente, colocársela con esmero y, una vez cumplidos estos
requisitos, olvidarse de ella.
El puño de la camisa
ha de sobresalir aproximadamente un centímetro y medio con relación al de la chaqueta.
El cinturón ha
de ser de color más oscuro que el pantalón.
La corbata. La
parte estrecha de la corbata no puede asomar por debajo de la ancha y el triángulo inferior tampoco ha de sobrepasar demasiado
la línea del cinturón.
A los calcetines
se les pide que combinen con los zapatos sin desentonar con los pantalones.
Del saludo:
Entre los usos
sociales más importantes está el saludo. Cuando una persona entra en la habitación
en la que hay varios conocidos sin mirar a nadie y sin observar una conducta social con la mirada, la palabra o el gesto,
tal omisión es señal inequívoca de agresión y de que la persona está enojada.
En nuestra sociedad,
el apretón de manos es el gesto utilizado para saludar. El apretón de manos ha de ser un gesto fuerte. Dar la mano débilmente
se asocia en los hombres con afeminamiento y fragilidad de carácter. En las mujeres está aceptada una mayor suavidad, no obstante,
si el apretón es demasiado débil puede ser considerado como signo de poca sinceridad o de reticencia. Podemos concluir que
el gesto de estrechar la mano debe ser breve y firme, de modo que no se muestre flacidez ni tampoco se sacuda con excesiva
fuerza el brazo del otro.
Un hombre puede
saludar a una mujer simulando el beso en la mano a la vez que inclina ligeramente la cabeza con un gesto rápido. Para evitar
precipitarnos en el saludo, hemos de estar atentos a la forma en que la mujer tiende la mano.
Según el grado
de confianza que se imprima al encuentro el gesto del apretón de manos puede ser reforzado asiendo con fuerza el antebrazo
de la otra persona, o incluso abrazándola.
La sonrisa es una
de las bases de la cortesía, de modo que ha de acompañar todos los saludos, excepto en aquellos casos en que demos la mano
a una persona como expresión de duelo o pésame.
La mirada a los
ojos de nuestro interlocutor es también un componente imprescindible del saludo. La profunda expresividad de la mirada y su
enorme gama de matices permiten comunicar con gran fidelidad nuestros sentimientos.
Una antigua costumbre
prohibe hablar con aquellas personas que previamente no nos hayan sido presentadas.
El orden de cortesía
que debe seguir en las presentaciones es el siguiente:
Los hombres son
presentados a las mujeres.
Entre dos personas
del mismo sexo, el más joven se presenta al de mayor edad.
En caso de existir
algún tipo de jerarquía social o profesional, el inferior es presentado al superior.
Para presentar
a un “anciano profesor” y una joven señorita, prevalece la edad sobre el sexo, de modo que la dama será presentada
al caballero.
La postura de las
personas cuando son presentadas debe ser siempre de respeto, es decir, en pie.
Los caballeros
habrán de levantarse durante las presentaciones.
Una mujer no se
levanta cuando le es presentado un hombre, salvo que este sea de mucha edad o de una elevada categoría social.
Cuando dos damas
son presentadas entre sí, la de mayor edad puede permanecer sentada, mientras la más joven deberá levantarse.
Respecto al tuteo,
la prudencia recomienda pecar de exceso de educación antes de atribuirnos confianzas que nadie nos concedió. En caso de duda
siempre se cumple recurriendo al “usted”. No es correcto tutear a camareros, taxistas o doncellas. En general
es de mal efecto tutear a personas que, por razón de su profesión deban contestarnos empleando el “usted”.
6- Tabaco,
alcohol y otras drogas
Drogas son las
sustancias conocidas como tales, incluidos los tranquilizantes, el alcohol, el tabaco y las medicinas modernas.
El consumo de drogas
provoca en la persona un estado de alteración. La persona siente inquietud, angustia y malestar físico. El ánimo decae. El
carácter se vuelve inestable, variable y maniático. La mente es sometida y dominada por ideas obsesivas y delirantes. El aspecto
físico se demacra, la piel pierde frescor, como una planta que se marchita. La mirada se nubla, pues el ojo no puede ver con
claridad.
Frente a toda esta
pobredumbre, los resultados obtenidos por la medicina del Tercer Reich se centraron en las virtudes de la comunión con la
naturaleza, los beneficios del deporte, la medicina natural y el rechazo de estimulantes como el alcohol o estupefacientes,
incluidos medicamentos y tranquilizantes.
En el Tercer Reich
se llevaron a cabo campañas antitabaco de gran efectividad. Los carteles “Prohibido Fumar”, proliferaron en todos
los edificios públicos, especialmente en las salas de espera. Churchill y Stalin eran fumadores.
Churchill, degradado y sometido por múltiples
vicios, era un ser víctima principalmente del alcoholismo, una adicción que le tenía totalmente dominado física y mentalmente
desde el desayuno. Podemos constatar la evolución de su proceso de degradación físico-mental en la abundante documentación
fotográfica de su vida. Sus ojos vidriosos y nublados, el cansancio vital ocasionado por el alcohol y acentuado con el paso
del tiempo, nos hablan de un ser sometido a vicios y adicciones: la suya no es una vejez honorable, sino la degradación de
un vicioso.
El alcohol y las
drogas provocan la disolución del ser y destruyen la vitalidad, produciendo pérdida de energía e impotencia física y sexual.
Las capacidades de razonamiento se ofuscan y sobreviene una sensación de inercia. Destruyen la resistencia del cuerpo a la
enfermedad y la mente se llena de sensaciones oscuras y estados de ánimo demoníacos. Caso de tomar alcohol, es preciso que
su consumo sea ocasional, muy responsable y limitado. Sobre las demás drogas, su consumo debería circunscribirse únicamente
dentro de disciplinas iniciáticas, en circunstancias especiales, con una preparación previa y teniendo siempre en cuenta el
peligro que implican.
Las medicinas modernas
destruyen la salud. Por un lado frenan el desarrollo de la enfermedad pero a su vez provocan debilidad y efectos secundarios
desastrosos; es decir, no atacan tan sólo la enfermedad sino que también atacan la salud de la persona consumidora. Por esto
es preciso buscar la salud mediante una vida sana y evitando en lo posible las medicinas que son el negocio de los laboratorios
del actual sistema supracapitalista.
Sabemos que el
Sistema “democrático” mundo fomenta y “tolera” a todo tipo humano débil y esquizofrénico fácil de
manipular y dominar. Por otra parte, este mismo Sistema actúa con efectiva contundencia
contra sus auténticos adversarios, asesinándolos y bombardeando sus ciudades y aldeas matando impunemente a madres, niños,
ancianos, hombres... No obstante, este mismo Sistema permite la venta de drogas en lugares conocidos de cualquiera y su policía
no hace nada para impedirlo, cuando oficialmente la venta de ese tipo de substancias está prohibida.
En las puertas
de los colegios e incluso dentro de los mismos, entre los jóvenes, prolifera la venta de estupefacientes. Se vende droga en
discotecas, esquinas, bares que todo el mundo sabe... A veces la cosa es tan escandalosa que los vecinos lo denuncian, pero
la policía no interviene o si interviene es exclusivamente para instalarlos en otra parte y la muerte sigue extendiéndose
sucia y viscosa.
La prohibición
oficial del tráfico de las drogas, garantiza el negocio de su distribución a quienes forman parte del Sistema que domina el
mundo: impide la llegada de advenedizos pues la policía actúa exclusivamente contra quienes trafican con droga sin carta blanca
del Sistema. De esta forma, es un gran negocio dominado exclusivamente por los dueños del mundo. Además, mediante la droga,
el Sistema consigue debilitar y nublar la mente de la juventud, creando seres fáciles de dominar.
7- La alimentación
y el respeto a los animales
Ante todo, cuando
nos alimentamos habríamos de tener presente que el hecho de alimentarse tiene por fin transformar la energía del alimento
en Fuerza y vigor para poder disfrutar así de buena salud. La alimentación debe ser abordada con atención y sin caer en fanatismos
de ningún tipo, estimando en cada caso la dieta más adecuada a nuestras necesidades biológicas personales. Es una grave irresponsabilidad
contra uno mismo caer en una rutina de gula viciosa y desenfrenada como lo es igualmente adoptar una dieta estrictamente vegetariana
sin tener en cuenta las repercusiones que esta ha de tener sobre nuestro organismo. En este punto, nuestro consejo es no dejarse
intimidar por la actitud ni los discursos de unos o de otros sino estar atento a las señales que percibimos de nuestro organismo
y tener por meta siempre la salud y la integridad física y mental. A fin de cuentas, somos nosotros y no los otros quienes
hemos de soportar nuestra corporeidad física, por lo que hemos de ser nosotros quienes descubramos qué alimentación nos viene
bien o mal. Cada cuerpo físico es diferente y tiene diferentes necesidades alimenticias debido en parte por la alimentación
realizada desde el momento del nacimiento y en parte por herencia racial. Si nuestra biología física nos demanda alimento
animal, negárselo equivale a afrontar carencias que necesariamente comportarán enfermedad, cosa que va contra nuestros principios.
Por lo tanto, resumiendo, invitamos a cada uno a no hacer de la alimentación una obsesión en ninguno de los dos extremos,
sino a tenerla por un proceso necesario del que extraemos la energía básica para la supervivencia en este universo en el que
toda la creación vive de devorarse a sí misma.
Friedrich Schlegel defendía la tesis de que
los antiguos arios hubieron de emigrar cuando sustituyeron la dieta vegetariana por la carnívora: “¿No habrá sido precisamente esta inquietud la que habrá perseguido incesantemente al fugitivo, al igual que
al primer asesino marcado con sangre, empujándolo hacia los extremos de la
Tierra?”.
Richard Wagner retomará esta idea de Schlegel y del vegetarianismo, para defender la idea de que en el consumo de carne provocó en la humanidad la
sed de sangre. Desde entonces el bestialismo se apoderó de la especie humana, sucediéndose las guerras y los crímenes. Las
enfermedades ligadas al consumo de carne hicieron que disminuyera la salud físico-mental y la duración de la vida.
El consumo excesivo
de carne sería causante de desorden y de estados mórbidos a nivel físico-mental, lo que según algunos autores estimularía
la obsesión y el vicio sexual y las relaciones sexuales caóticas e indiscriminadas, cosa que favorecería la mezcla y el desorden
racial.
La necesidad de
vigilar el consumo de carne es compartida por religiones históricas. Los cátaros consideraban el consumo de carne como una
maldición. Las plantas surgen a la vida de la tierra ante la luz del sol. De esta forma, las plantas contienen la luz del
sol, por lo que su consumo favorece la liberación de la cárcel sombría de la materia. Comerlas equivale a alimentarse de la
luz solar.
Otto Rahn advierte que los maniqueos tienen
prohibido matar animales para no perturbar la ley de la metempsicosis. Al comer carne, nuestro ser se quedaría vinculado al
ánima del animal consumido.
Muchos nazis célebres
eran vegetarianos. Hitler practicaba el vegetarianismo, al menos desde 1924, tras
conocer a Rudolf Hess estando en la prisión de Landsberg. El día de la boda de
Baldur von Schirach, Hitler le dio una nota a la novia con las instrucciones culinarias
que debía tener en cuenta para cuando fuera a hacerles una visita: “Yo como todo
lo que la naturaleza proporciona voluntariamente: fruta, verdura, grasas vegetales. Pero ruego me sea evitado todo aquello
que los animales dan a su pesar: carne, leche y queso. Así pues, de un animal, sólo los huevos”. Hitler entendía
que el vegetarianismo responde a la inclinación natural del ser humano y que el consumo de carne constituye una degeneración
antinatural.
Un documento de
Julio César, informa que el ejército romano seguía una dieta basada casi exclusivamente
en frutas y cereales, y recurría a la carne sólo en tiempos de escasez. Los vikingos tampoco habrían llevado a cabo sus legendarias
expediciones si hubieran tenido que depender de una dieta carnívora. Según Hitler
en el pasado el hombre vivía más tiempo y el punto de inflexión lo constituyó el paso a consumir carne y alimentos cocidos.
Algunas normas
dietéticas:
-Evitar o reducir
lo más posible el consumo de alimentos artificiales que tengan conservantes o colorantes.
-Evitar alimentos
refinados como harina, arroz y azúcar blancos; en su lugar consumirlos integrales.
-Evitar alimentos
demasiado picantes, amargos, ácidos o salados, pues destruyen el equilibrio de cuerpo y mente.
-Evitar el consumo
excesivo de carnes.
-Evitar el consumo
de, alcohol, tabaco, alimentos fermentados y las sustancias rancias o excesivamente maduras.
-Evitar comer en
exceso.
Incluimos a continuación
la relación de alimentos sátvicos, que son, según la tradición hindú, los que constituyen la dieta más pura y adecuada. La
alimentación sátvica nutre el cuerpo y lo mantiene en un estado de paz. Además serenan y purifican la mente. Si queremos tener
lucidez y salud, debemos pues tener una mente clara y calma en un cuerpo vigoroso con una adecuada circulación de energía
entre los dos. Los alimentos sátvicos incluyen:
-cereales, arroz,
pan integral.
-fruta (secas y
frescas), zumos de frutas,
-verduras y hortalizas,
-legumbres,
-semillas y semillas
germinadas,
-miel,
-tés de hierbas.
Hitler siempre
tuvo mucho afecto por los animales, en especial por su perro Blondi y mostraba contrariedad por la afición a la caza de algunos
de su entorno, como el mismo Goering. En las películas del Tercer Reich, un soldado alemán jamás abandona un perro.
Existen fundamentos
de carácter ético y espiritual, además de para la salud a la hora de vigilar el consumo de carnes o derivados. La cría de
animales para consumo humano en granjas industriales donde se hallan privados de la más mínima libertad y dignidad, implica
una responsabilidad a nivel personal en el consumidor. Al hallarse en condiciones insalubres, privados de luz solar y de aire
libre y hacinados en lugares insanos, son tratados con gran cantidad de medicamentos y antibióticos para evitar que desarrollen
enfermedades. Estos tratamientos pasan a ser ingeridos por el hombre que consume la carne resultante de su crianza. Sólo en
USA se matan anualmente 25.000 millones de animales. Sus condiciones de vida son terriblemente crueles.
De los animales
se quiere obtener la máxima rentabilidad con el mínimo de inversión. Se les confina en espacios reducidos donde apenas pueden
moverse (así engordan más rápido), se les mantiene aislados (terneros de engorde) o hacinados (pollos). Tras unas condiciones
de transporte demenciales se les mata mecánicamente despojándoles de la piel y amputándoles las extremidades cuando aún están
conscientes. La angustia previa a la matanza es otro factor agravante en todo este cruel proceso en la que el animal genera
toda una serie de sustancias químicas perniciosas que serán ingeridas por el consumidor.
A lo ya indicado
respecto a los medicamentos y antibióticos con que son tratados los animales, hay que añadir las sustancias hormonales que
favorecen su engorde y crecimiento rápido. Todo este cúmulo de cosas, si es ingerido abundantemente por el consumidor de carne
y lácteos, provoca en su metabolismo:
-sobrecarga de
medicamentos y pesticidas (provenientes del pienso),
-sobrecarga y consiguiente
inefectividad de los antibióticos,
-acumulación de
substancias que desarrollan el engorde,
-crecimiento rápido.
Las nuevas generaciones
de jóvenes al ser alimentadas con carne y lácteos de animales sometidos a estos procesos, han desarrollado, al igual que los
animales que han consumido, una mayor estatura y volumen. La media de estatura y volumen ha aumentado en varios centímetros.
La cuestión es conocer las consecuencias internas y físicas de todo esto.
La carne animal
posee un elevado contenido en grasas saturadas que favorecen los trastornos cardíacos y la obesidad. Necesitamos proteínas
y hierro y la carne animal no es la única fuente ni la mejor para obtenerlos.
La soja es un alimento
con muchas propiedades y según los nutricionistas es en muchos aspectos sustitutiva de la proteína animal. Elaborada en diversas
formas, tiene un alto contenido en proteínas. Todos los productos de la soja son proteínas completas. El Tofú, por ejemplo,
se obtiene cuajando la leche de soja. Posee un 11% de proteínas y es bajo en materia grasa y no contiene colesterol. La soja
es tratada de forma que adquiere textura similar a la carne de vaca. El Seitán es proteína del gluten de trigo y tiene también
un aspecto muy similar a la carne. Si se combinan, por ejemplo, judías con arroz integral, nueces, semillas o maíz se obtienen
proteínas completas. El yogurt tiene también proteínas completas.
El pescado también
satisface nuestras necesidades proteínicas, tomado junto con cereales.
Los científicos
y nutricionistas consideran a la carne un alimento esencial debido a su elevado contenido en grasas y proteínas. No obstante,
los alimentos vegetales son los que contienen más sustancias que nos protegen del cáncer y que favorecen el sistema cardiovascular.
El consumo excesivo
de carne repercute, entre otras cosas, en la osteoporosis: además de contener
poco calcio, la carne acidifica la sangre y para neutralizar este fenómeno los huesos tienen que liberar calcio –mineral
alcalinizante– que es eliminado por la orina en forma de sales. El proceso se intensifica por las cantidades de fósforo
que contienen carnes, pescados y mariscos.
La acumulación
en el organismo de grasa saturada de las carnes aumenta el riesgo de padecer cáncer.
Las nitrosaminas que se forman por efecto de los nitritos sobre los aminoácidos de la carne en embutidos y piezas curadas
son responsables igualmente del desarrollo de variados cánceres.
El elevado contenido
en sodio de las carnes puede llegar a sobrecargar el organismo y favorecer las enfermedades
renales y cardiovasculares.
Las sustancias
residuales del metabolismo animal son de difícil eliminación para el organismo humano. Las purinas, que conceden a la carne
su sabor y aroma característicos, se transforman en nuestro organismo en ácido úrico que si no se elimina adecuadamente da
lugar a enfermedades inflamatorias, como la gota.
En carnes muy maduradas,
la proliferación bacteriana produce aminas vasoactivas, como la histamina y la tiramina, que son responsables de reacciones alérgicas, inflamatorias y aumento de la presión arterial.
El consumo excesivo
de carne genera multitud de problemas en la persona. El listado de estos trastornos sería interminable. Además, la carne que
se consume actualmente, es de animales terriblemente insanos sometidos a procesos de crecimiento y engorde rápido mediante
sustancias dañinas y atiborrados de medicamentos y antibióticos. Pensemos que, entre otras muchas aberraciones y crueldades,
en las granjas, animales herbívoros son alimentados con piensos que contienen carne.
Por todo lo dicho,
a la hora de consumir carne deberíamos limitar su consumo a la estrictamente necesaria por nuestra biología. Si nuestra biología
necesita un consumo de carne en la dieta debemos de limitarlo a la necesidad básica y sobre todo, nunca dejarnos llevar por
la gula en un alimento que proviene de la muerte de seres vivos. Además, hemos de tener en cuenta que en países más fríos
el consumo de alimentos animales es más necesario que en países más cálidos. También está el factor de que hay personas cuya
biología asimila mejor o peor una alimentación vegetariana, por lo que la adopción de una dieta de este tipo debe ser algo
individualizado y muy responsable.
8- El amor
es más fuerte que la muerte
La canción del
camarada, un canto antiguo, nos habla de la lealtad hacia el camarada. Y al guardar esta lealtad, en el fondo, estamos siendo
leales a nosotros mismos, como en un reflejo. Sólo puede ser leal con los demás quien es leal consigo mismo. Dice la canción
del camarada:
“Si tú duermes,
yo velo por tí,
Si tú partes,
yo combatiré
por los dos.
Porque a cada guerrero,
los dioses le han dado un camarada”.
El honor es patrimonio
de todo hombre verdadero. “Mi honor se llama lealtad”. La lealtad es
un sentimiento que surge de dentro de uno mismo y nos habla de la nobleza del ser. Es algo que se reafirma en la camaradería
de la lucha, pero antes que esto es un sentimiento que se lleva en uno mismo, a flor de piel, en la sangre, en el mismo alma.
Algo que se es, un acto de pura consciencia. Un guerrero, con sus camaradas, sólo sabe ser fiel, porque sólo es fiel a sí
mismo quien es fiel a los suyos.
Lo mismo le sucede
al guerrero con su amada. Ella inspira todas sus batallas en este mundo y en el más allá. En este caso no cabe deslealtad
porque ella es parte de sí mismo. Si la traicionara, se traicionaría a sí mismo. El Demiurgo, movido a ello por su principio
satánico, busca la destrucción del amor. Pero el verdadero amor es más fuerte que la muerte. Afortunado aquel que encuentra
el amor verdadero.
9- Liberarse
de la caverna de las sombras
En este mundo,
ya desde bien pequeñitos, vamos siendo inculcados en el materialismo. El mundo vive no ya apartado, sino totalmente ausente
del espíritu divino.
Un mundo así, como
este mundo moderno, es un lugar carente de bien y de belleza: sus realizaciones son frías y desangeladas. La muerte extiende
su frío aliento por todas partes, marchitando la vida.
En el colegio,
las tiernas mentes de los niños son educadas en el “arte” de la mentira, el engaño y la “democracia”.
La historia que se inculca es una historia falsa contada además sobre patrones y valores falsos. Según la “educación-programación”
del Sistema, sólo es verdad lo que el Sistema cuenta. Lo que uno mismo pueda llegar
a pensar por sí mismo es siempre relativo. Si lo que uno piensa no entra en el abanico que el Sistema permite, es tachado
de chaladura delirante y peligroso... Finalmente, si persistimos en el “error” de tomar por verdad a algo que
está fuera del Sistema, su “democracia” nos mostrará su verdadero rostro: El Gran Hermano vendrá a acabar con
nosotros. El Sistema utiliza sutiles y no tan sutiles métodos de intimidación
y coacción que introduce en nuestro cerebro para que no nos atrevamos a pensar sobre ciertas materias o para que no pensemos
de forma “peligrosa”. Nos dicen: “La verdad no existe, todo es relativo”.
Así crean seres incapaces de afirmar nada que esté más allá del Sistema. En la relatividad de Sí mismos, los seres “democráticos”
son presos obedientes a las ideas en que son inculcados a todas horas desde pequeñitos. Incluso su “rebeldía”
y su malestar es programado y teledirigido por el Sistema. El Sistema que domina el mundo se ocupa de ocultar Sus movimientos
y Sus crímenes inventando un mundo en el que Él no existe y los tiranos son otros. Como vemos, para un demócrata todo es “relativo”,
salvo las “verdades democráticas” del Sistema: estas son incuestionables. Este ser está tan inculcado por estas
ideas desde que nace que ni siquiera se da cuenta de cómo le condicionan ni del mecanismo mediante el cual es esclavizado.
Mas como le han programado para creer que es libre, su mente no puede concebir que en realidad no es otra cosa que un esclavo.
Ante cualquier atisbo de consciencia, en su cerebros se impondrán siempre las ideas
laberínticas en que le ha programado el Sistema “democrático” capitalista.
El mismo Sistema
demoníaco que domina el mundo, inventa “causas”, “ideales”, todo tipo de teorías sociales y políticas
para mantener distraída a la juventud y a toda la sociedad y así tenerla encauzada en su “democracia” capitalista.
La Alta Finanza Mundial crea y “ayuda”
a organizaciones ecologistas y de todo tipo, ONGs, grupos alternativos, feministas, homosexuales, Amnistía Internacional...
Greenpeace, por ejemplo, es totalmente una creación de Rockefeller: nunca les
veremos actuando contra intereses de su patrón, sino siempre contra sus adversarios. Además, los medios de “comunicación”,
dan tiempo para “expresarse” y defender sus “ideas” a todo tipo de grupos “antisistema”,
preferiblemente gente caótica y degenerada, como okupas, anarquistas, “antifascistas”, grupos musicales drogadictos
y todo tipo de gente “alternativa” que se arrastra en el vicio y el hedonismo. Ese tiempo le es negado y prohibido
a los escasísimos grupos dignos que reclaman un mundo nuevo fundamentado en los valores eternos. Existe todo un entramado
“alternativo” que no es más que creación del mismo Sistema. Una creación “alternativa” creada con
el dinero de la Alta Finanza Mundial para mantener
idiotizadas a las masas en la ilusión de un “mundo libre”.
Los medios de “comunicación”
de masas están totalmente controlados por la
Alta Finanza y el capitalismo mundial. Existen numerosos trabajos en los que se detalla cómo el capital judío
domina los medios de “comunicación” de Occidente y de casi todo el mundo. Así mismo, los directores y administradores de los medios son gente de ellos o directamente a sus órdenes, por necesidad económica
directa.
El mundo moderno
está dominado por un demonio: el Demiurgo Jehová. Desde la derrota de la Primera Guerra Mundial, el poder mundial utiliza todo tipo de métodos para
la dominación planetaria. Mediante los rayos “takiones” de partículas subatómicas, rayos “T”, cambia
y manipula las mentes de los habitantes de países enteros. Estos rayos son un tipo de energía “alternativa” de
partículas subatómicas descubierta por Nicolas Tesla. Esto, junto a los mensajes subliminales con que bombardea la televisión,
además del consumo masivo de bebidas drogadas, como Coca-Cola, que producen adicción, están consiguiendo crear un mundo de zombis bajo su control. La informática y la cibernética están substituyendo la
capacidad de usar y desarrollar el astral, impidiendo y “substituyendo” la verdadera transmutación y el Gran Poder,
por una burda “imitación de la verdad”.
El ser humano es
una fuente energética que canaliza su energía de diferentes maneras ya sean positivas o negativas. La palabra es algo fundamental
en la relación con los demás, pero el mundo “democrático” hace que nos estemos contaminando y contaminemos por
su mal uso. Hay palabras que armonizan y otras que crean ambientes caóticos y conflictivos. La música también es un agente
importante. Hay partículas que adheridas a las cintas magnetofónicas de los cassettes vibran y se acomodan de acuerdo al sonido.
Al ser expuestas estas partículas a música como el rock y sus variantes, se observa que adquieren movimientos y formas desordenadas.
Realizando el mismo experimento con palabras inarmónicas y grotescas se produce el mismo resultado. Al ser expuestas las partículas
a música clásica o de corte armonioso así como a palabras llenas de armonía y positivas, se observa que estas partículas adquieren
formas geométricas armoniosas, seguidas de movimientos que indican orden y armonía total.
Hablar es poner
en movimiento fuerzas de la naturaleza: la palabra y la música son el conjunto de varios sonidos que expresa el pensamiento.
Cada sonido que se emite vibra dentro y fuera de nosotros y pone en acción fuerzas energéticas que aunque no se ven nos responden
con reacciones determinadas de acuerdo con la energía que originemos en la palabra y el pensamiento.
Dentro de las facultades
ocultas del sonido está la de afectar el ordenamiento molecular y los procesos fisicoquímicos de los cuerpos, actuar con sus
vibraciones sobre los demás cuerpos y originar vibraciones que se extienden por el planeta afectando a todo en general. Sabiendo
esto, podemos imaginarnos cómo afecta al ser humano la televisión, la música, la radio, el cine...
La televisión tiene
un poderoso poder hipnótico que podemos comprobar en cualquier lugar en el que haya encendida una pantalla televisiva en un
lugar concurrido: todo el mundo tiende inconsciente a mirar la pantalla. La televisión nos introduce en controversias y discusiones
destructivas. Transmite ideas degeneradas y caóticas. Los presentadores, speakers, actores... son falsos, están excitados,
nerviosos, histéricos y drogados (cocaína, etc.). Igualmente los actores de películas son drogadictos y transmiten su psiquis
a los incautos. Encender la televisión es permitir entrar en tu casa a un ente maligno
que trata de destruirte por todos los medios posibles.
El rock es una
degeneración de la música y un sonido introducido por las fuerzas oscuras. En un principio se introdujo el rockandroll, y
en la actualidad tenemos grupos que toman trazos de música gótica, clásica, etc. mezclándola con el rock para hacerlo más
atractivo. Estos grupos drogadictos y degenerados al servicio consciente o inconsciente del Maligno, mandan mensajes de tipo
subliminal que no pueden ser captados a simple vista, pero que el subconsciente asimila. En todo ello existe un mensaje nefasto
cuya intención es esclavizar y hundir nuestra alma en el caos. Los sonidos son tratados adrede, la letra de las canciones
son a veces disimuladas con buenas intenciones y hablan de amor, etc. El Demiurgo aprovecha cualquier ocasión para atacar
por donde menos nos imaginamos.
En fin. Desde pequeñitos,
venimos siendo adoctrinados y esclavizados por un
Sistema demoníaco
que tan sólo busca debilitarnos y enfermarnos para poder dominarnos y mantenernos presos de su mundo: una pesadilla que se
repite una y otra vez.
Aquellos que hemos
despertado y percibido la enorme conspiración a la que están siendo sometidas nuestras vidas, no deberíamos quedarnos únicamente
en una actitud superficial. Es posible liberarse de las cadenas que el Sistema ha introducido en nuestro ser y que nos alcanzan
hasta la médula. Esto es lo que nos han enseñado siempre los verdaderos Maestros. Sabemos que no es fácil liberarse de unas
cadenas que, por el hecho de llevarlas desde pequeñitos, apenas podemos distinguirlas de lo que somos nosotros mismos. A veces,
la astucia demoníaca del mundo, pudiera hacernos creer que liberarnos de las cadenas que nos mantienen presos es renunciar
a nosotros mismos...
Pero nosotros no
tenemos alma de esclavo. Las ilusiones del Maligno no pueden engañar nuestra consciencia ni esclavizarnos. La naturaleza verdadera
y profunda de nosotros mismos, sólo nos permite ser hombres libres.